Actualmente, disponemos de numerosos tipos de modelos de cajas fuertes en el mercado, cada una adaptada a determinadas necesidades, e incluso presupuestos. Entre las principales podemos mencionar:
Cajas empotradas: Las cajas empotradas son aquellas que se alojan dentro de la pared, y en algunos casos en armarios o estanterías de doble fondo. La instalación de cajas fuertes empotradas requiere de la realización de obras en el lugar donde se ubicará.
Antes de definir su ubicación, será necesario determinar si la pared o muro es sólida y si dispone del grosor suficiente para soportar el montaje de la caja fuerte. Las cajas fuertes empotradas son especialmente recomendables para oficinas o viviendas unifamiliares.
Cajas fuertes móviles: Son aquellas que se pueden transportar de un lugar a otro y que no requieren de la realización de ningún tipo de obra. Sin embargo para que sean realmente eficaces, deben ubicarse en lugares que no estén a la vista del público.
Estas cajas fuertes también pueden anclarse a superficies mediante herrajes para una mayor protección. Pueden encontrarse en diversos tamaños. Las cajas fuertes móviles o portables son más recomendadas para resguardar documentos de valor y evitar que se deterioren con el paso del tiempo.
Cajas fuertes ignífugas: Están especialmente diseñadas para soportar altas temperaturas y fuego. De acuerdo a su grado de protección, pueden resistir entre 30 minutos hasta 2 horas de llamas.
Gracias a esta característica, son ideales para proteger documentación, material informático, dinero y objetos de valor ante un posible incendio.
Cajas fuertes homologadas: Este tipo de caja fuerte han pasado a través de ensayos para dar cumplimiento a normativas vigentes. Son exigidas para la guarda de armas cortas y largas, establecimientos como como gasolineras y estaciones de servicio y locales comerciales como joyerías, “compro oro”, administraciones de lotería, casinos, bingos, empresas de seguridad y bancos.
Las cajas fuertes homologadas se clasifican en grados según norma UNE 1143-1, mientras menor sea el número, menos resistente será la caja fuerte. Estas cajas fuertes por lo general cuentan con puertas con un espesor entre 8 mm a 10 mm como mínimo y están reforzadas con varias capas de acero y otros materiales altamente resistentes.
Los distintos grados de certificación de cajas fuertes homologadas son:
Grado I: Recomendadas para la guarda de armas largas y municiones. Son de uso particular.
Grado II: Utilizadas en negocios o viviendas para guardar documentos u objetos y bienes de valor.
Grado III: Cajas homologadas para custodiar municiones y armas cortas en empresas de seguridad o en locales con servicio de vigilancia armada.
Grado IV: Indicada para empresas y particulares que quieran elevar el grado de protección y custodia de sus bienes y dinero en efectivo. Obligatorias para Joyerías, administraciones de Lotería, Bancos y casinos
Grado V: Recomendadas para empresas que quieran resguardar objetos de gran valor y obras de arte.
Las empresas especializadas en la instalación de cajas fuertes presentes en nuestra guía también ponen a su disposición servicios tanto de apertura como de reparación de cajas fuertes.
Para esos casos en los que haya perdido su llave o haya olvidado la clave secreta para realizar la apertura, usted puede contractar con estos profesionales quienes a través de su servicio de urgencias 24 horas podrán dar solución a cualquier inconveniente que presente su caja fuerte.
Estos cerrajeros profesionales disponen de las herramientas y los conocimientos para realizar la apertura de cajas fuertes de forma correcta, sin ocasionar daños y sin poner en riesgo la integridad y la estética de su caja fuerte.
La elección de una caja fuerte es una decisión que no debe tomarse a la ligera y es por ello que los especialistas en la instalación de cajas fuertes les dan las siguientes recomendaciones:
La elección del lugar donde se ubicará: Si es posible realizar obras, entonces es recomendable elegir una caja fuerte empotrada ya que eleva el nivel de seguridad y protección de sus bienes. En caso de que no sea posible realizar obras, entonces será necesario encontrar un lugar donde ocultar la caja fuerte. De este modo prevenimos que quede a la vista de terceros.
La ubicación que elijamos para nuestra caja fuerte también condicionará el tamaño que debamos elegir, por ello recomendamos tomar medidas para asegurarnos que la caja fuerte se ubicará sin problemas
El tamaño de los objetos que guardaremos: Debemos definir el uso que le daremos a la caja fuerte. Si solo será para resguardar documentos, dinero o joyas, podremos optar por una caja fuerte pequeña o mediana. Sin embrago, deberás prever si en el futuro también querrás guardar objetos de mayor tamaño.
Cuáles son tus necesidades: De acuerdo a tus exigencias de seguridad dependerá el tipo de caja fuerte que debas elegir. Como ya comentamos, existen diferentes modelos de cajas e incuso, distintos grados de protección, lo cual también influye en su precio final.
Valora si en realidad necesitas una caja fuerte de alta seguridad o por el contrario no es necesario una caja fuerte con un alto grado de protección.
Para asegurar el correcto funcionamiento de la caja fuerte es imprescindible que esta tenga una buena instalación y sobre todo, que sea realizada por especialistas y es por ello que en esta guía conseguirás la lista más completa de las empresas especializadas en el montaje de cajas fuertes de tu localidad.
Póngase en manos de empresas especializadas en la instalación de cajas fuertes y tenga la tranquilidad de saber que sus objetos de valor más preciados estarán bien resguardados en todo momento.